jueves, 22 de octubre de 2015

Jaula de Cristal

jugando con las palabras de la letra de la canción de Serrat "De Cartón Piedra"



visto en el Museo de la Evolución, Burgos
Mi nombre es Gloria y dicen de mí que, visto de tul con zapatos de falso charol que chispean al roce del sol. Que soy mujer de mirada lejana con una boquita menuda y granate que sonríe de cara al escaparte. Con corazón dividido, porque yo amaba a dos hombres, Esteban y Epifanio, y me desgranaba entre dudas y ecos con cada cita. Y, sin embargo, durante una hora, leía en sus labios lo limpia y bonita que siempre me veían. “Arregladita como pa' ir de boda” se decían. Esto hacía más tierna mi existencia de cartón piedra. 

Llegado el día, yo esperaba en mi vitrina hasta verles doblar aquella esquina, impaciente como una novia. Como una durmiente, disoñando con pedirles que huyamos a reescribir la historia. No eran pelanas de asir la ocasión, los caballeros que me ojeaban de frente y perfil. Que me arrancaran la etiqueta de cuajo, y con la presteza que da el negocio, olvidan el aliento del ayer y aprovechan la oportunidad del aquí y ahora: ayer ya no esta y mañana por llegar.

Como pude me dejé caer y me cargué el cristal y corrí, corrí hasta alcanzarles en un portal. Mi cuerpo tembló cuando me cogieron en brazos. Me sonreía la luna de marzo. Comenzó a llover y con osadía me portaban, a paso presuroso, un, dos, tres… un, dos, tres… no les importaba que les hablará del futuro, ellos guardaban silencio… ¡os lo juro!

En volandas me regresaron, entre aquellas tres paredes y un cristal, y el techo se reventó contra mi pecho pena tras pena. Por unos instantes hice mío el universo y escribí un pasado en prosa poética dentro del mapa de la pasión contenida.


Grotesca gratitud de una maniquí enamorada por los reflejos de quienes vienen a verme de mes en mes, de dos en dos y de seis a siete.


http://www.cancioneros.com/nc/1879/0/de-carton-piedra-joan-manuel-serrat

martes, 6 de octubre de 2015

en pocas palabras

Era capaz de poner el universo en movimiento apenas con dos palabras. “Cincuenta céntimos”. Estas dos palabras formaban la frase, repetida hasta la saciedad, preferida de Fernando, un jubilado con la voz quebrada, triste figura y luchando en su derrota. Para mí que coincidí con él, paradojas de la vida, por su aspecto y por sus historias, Fernando bien podría ser uno de los renglones torcidos de Dios. Era un muñequito roto con diferentes capacidades, por su degenerativa enfermedad ósea y su accidentada vida. Cadera descompensada que le obligaba a usar zapato con alza de 6 centímetros, un codo desarticulado en un accidente con un bordillo, boca torcida y mano derecha agarrotada eran algunas de las diferencias que, junto a su vida en soledad y la condena al ostracismo por parte de quienes le conocieron y familia, me hacían caer en eso de los renglones torcidos. ¡Cincuenta céntimos! ¡Cincuenta céntimos! ¡Cincuenta...! se lo escuchamos decir a Fernando de sus labios como metralleta. Con poco se conformaba, podrían pensar ustedes, y pocos podían ver lo que estas dos palabras escondían.

DEP

el engaño sobre la mesa

guiso de boniato con alubias blancas
Llego el mes de octubre, el cambio estacional irrumpe con descaro en nuestros días y nos carga de otra energía, más templada. Después de la música jubilosa y radiante del estío pasamos a la melodía suave y tibia del otoño que es más de invitarnos a quedarnos en casa (por el clima) y nos precarga, también para cerrar el año y promover uno nuevo. Como todas las estaciones tiene también sus frutos, es época de higos, uvas, grosellas, arándanos, moras, granadas…, deliciosos manjares que no sólo estimulan su consumo, sino que también nos ayudan a ponernos guapas de pies a cabeza, renuevan aquello que el sol y la aridez del verano han afectado: la piel.

Hay otras cuestiones, planes, negocios o caprichos y extravagancias que están ahí en barbecho, esperando que les demos forma, que les pongamos presupuesto, que se establezcan pautas para iniciarnos o retomarlos el próximo año, pues quizás sea esta la estación apropiada para ponernos en movimiento y hacernos con ellas.

Todo movimiento conlleva desgaste y la necesidad de leña para alimentar la cardera. Y de alimentarnos quiero manifestar que nos tienen engañados. Si atiendes a los consejos, vengan de los medios de comunicación que vengan, las dietas publicadas en toda revista que se precie o cadena televisiva y a las recomendaciones sobre nutrición, bien de la industria bien de la medicina, nos encontramos con que en todas ellas se refieren o hacen alusión a la proteína animal como necesaria para nuestra sana y equilibrada alimentación.

¡NOOOO! todo lo contrario. Como afirma en su libro sobre la nutrición el Dr. Campbell, la ingesta de la proteína animal es el principal factor para enfermar en los seres vivos. El cáncer, por citar una, según los estudios del Dr. Campbell y avalados y refutados por otras muchas conclusiones de diferentes investigaciones, durante los últimos treinta años, es determinante su consumo o no para que una persona tenga o no cáncer a lo largo de su vida.

¿A quiénes beneficia el consumo de proteína animal? A la industria alimentaria, las grandes empresas alimenticias y sus astronómicas cifras de ganancias.

¿A quién beneficia abandonar el consumo de proteína animal y sustituirlo por la vegetal? A nuestro cuerpo. Nuestra salud aumentará. Por tanto, dejaremos de estar enfermos, de consumir fármacos para reducir el colesterol o mantener la diabetes en niveles aceptables para sobrevivir.

Yo pienso que, la vida es un espectáculo al que debemos presentarnos con las mejores galas. Para ello, una alimentación baja en proteínas animales, equilibrada y placentera nos ataviará con inmaculados ropajes. Y Con esta energía, quiero haceros llegar mi sentirme feliz, como siempre y es bueno expresarlo, para que la energía del otoño y sus frutos se reflejen con luz en nuestro aspecto.

¡Come sano, come vegano!

¡Go Vegan! 

Si quieres conocer lo que dice el libro su título es “EL ESTUDIO DE CHINA, efectos asombrosos en la dieta, la pérdida de peso y la salud a largo plazo”. Dr. T. Colin Campbell y Dr. Thomas M. Campbell II

Una sola reseña a los elogios recibidos:

“Todos los que trabajamos en nutrición debemos estar agradecidos al Dr. Campbell, quien es una de las grandes eminencias en el tema. Este es uno de los libros más importantes que jamás se haya escrito sobre nutrición- leerlo puede salvarte la vida”. 
DR. DEAN ORNISH, Fundador y Presidente del Instituto de Investigación en Medicina Preventiva en Sausalito, California. Profesor Clínico de Medicina en la Universidad de California, San Francisco. Autor de Dr. Dean Ornish’s Program for Reversing Heart Disease y de Love & Survival